Autoestima
La peor soledad es no estar cómodo contigo mismo."
– Mark Twain.
"¿Te sientes bien contigo mismo?"
Esta pregunta, que parece tan simple, puede resultar incómoda para muchos. A veces, cuando hablamos de autoestima, pensamos en frases motivacionales o en la idea de “quererse a uno mismo” sin realmente detenernos a explorar qué significa. La realidad es que la autoestima no es simplemente gustarte a ti mismo frente al espejo, sino sentirte suficiente, valioso y digno de las cosas buenas que la vida tiene para ofrecerte.
Sin embargo, no siempre es fácil tener una autoestima saludable. Las experiencias que vivimos, las palabras que escuchamos de los demás y los mensajes que recibimos a lo largo de nuestra vida van moldeando la forma en que nos vemos a nosotros mismos.
Si has crecido escuchando críticas o has tenido experiencias que te hicieron sentir que no eras suficiente, es posible que hoy te cueste valorarte tal como eres.
La baja autoestima puede manifestarse de muchas maneras: quizás te exiges demasiado, te comparas constantemente con los demás o evitas situaciones en las que podrías destacar por miedo a no ser lo bastante bueno. Este diálogo interno, que te recuerda tus supuestas limitaciones, no es más que el reflejo de los guiones que has aprendido a lo largo de tu vida. Estos guiones, como bien señalan algunos terapeutas, son como mapas internos que te dicen cómo deberías ser, cómo deberías actuar, y lo que puedes esperar de ti mismo.
![](https://www.welcometoweare.com/wp-content/uploads/2024/09/weare-home.jpg)
¿Y si te dijera que esos guiones no son la verdad absoluta?
Que esa versión de ti que te dice “no soy suficiente”, “no merezco esto” o “no puedo” no es más que una historia que, en algún momento, aprendiste a contar. Y que esa historia puede reescribirse.
La baja autoestima no es algo con lo que hayas nacido, es algo que se construyó a lo largo del tiempo. La buena noticia es que, al igual que se construyó, también se puede deconstruir. Y ahí es donde entra la terapia. La terapia te ofrece un espacio seguro para revisar esas creencias limitantes, para cuestionarlas y para empezar a construir una nueva narrativa sobre ti mismo.
¿Cómo se construye una autoestima saludable?
No es un proceso mágico ni inmediato. Se trata de un camino en el que vas descubriendo poco a poco quién eres, más allá de lo que los demás han dicho de ti o de lo que tú has creído sobre ti mismo. Es aprender a ser compasivo contigo, a entender que no necesitas ser perfecto para ser valioso, y que tus errores no definen tu valor. La autoestima se construye cuando empiezas a verte como una persona digna de amor, respeto y bienestar, tal como eres hoy, con tus fortalezas y también con tus vulnerabilidades.
A menudo, cuando la autoestima es baja, nos cuesta creer que merecemos cosas buenas, ya sea en nuestras relaciones, en el trabajo o incluso en nuestra salud. Puede que, sin darnos cuenta, nos pongamos barreras que nos impiden disfrutar de la vida porque en el fondo sentimos que no somos lo suficientemente buenos. Pero tú mereces ser feliz. Mereces sentirte orgulloso de quién eres y vivir una vida plena, sin la constante sombra de la autocrítica.
En terapia, te ayudamos a entender de dónde vienen esos pensamientos, y a descubrir nuevas maneras de relacionarte contigo mismo. No se trata solo de cambiar tu forma de pensar, sino de empezar a verte desde una nueva perspectiva. De aprender a darte el valor que mereces y dejar atrás esos guiones antiguos que te han mantenido atrapado en la duda y la inseguridad.
Construir una autoestima saludable es un proceso, pero no tienes que hacerlo solo.
En We Are, te ofrecemos un espacio donde puedes empezar a trabajar en tu relación contigo mismo, a sentirte más seguro, más libre y más en paz con quien eres. Porque, al final del día, la relación más importante que tendrás en tu vida es la que tienes contigo mismo.
Si sientes que te cuesta valorarte, que te exiges demasiado o que el miedo a no ser suficiente te está frenando, la terapia puede ser ese lugar donde comiences a transformar tu autoestima. Recuerda: no estás solo en este camino. Ven, hablemos, y juntos comenzaremos el proceso de reconectar con tu valor.